16 septiembre 2014

B.B. King


El 16 de septiembre de 1925 nació en Itta Bena, Mississippi, el guitarrista y cantante estadounidense de blues B.B. King, quien a finales de los años cuarenta se abrió camino desde los campos de algodón de Mississippi hasta Memphis (Tennessee), donde recibió el apodo B.B. (Blues Boy) y se ganó una reputación como uno de los mejores bluesmen de la historia. Durante más de 50 años el nombre de B.B. King permanecería como sinónimo de la música blues y recibió el título de 'Rey del Blues', reinado que compartía con un nativo de Memphis, el 'Rey del Rock'n'roll', Elvis.

King nació en el delta del Mississippi, un lugar que el mismo King describió en su autobiografía "el lugar más al Sur de la Tierra". Aunque existen diferentes fuentes sobre su lugar exacto de nacimiento, él sostenía que fue entre Indianola y Greenwood, cerca de Itta Bena. Fue llamado Riley por su padre, Albert Lee King, en memoria de un hermano fallecido. Aunque el joven King tuvo un hermano menor, este murió siendo niño, por lo que Riley fue criado como hijo único. Su madre, Nora Ella, abandonó al padre, siendo King muy joven y ambos se fueron a vivir con la familia de Nora. Allí, Riley fue criado por tres generaciones de parientes: sus bisabuelos, que habían sido antiguos esclavos, su abuela, y su madre. Los miembros de la familia se ganaban la vida como aparceros en las plantaciones de algodón. King aprendió en ese ambiente que la música era una seña de identidad de los suyos, no solo un entretenimiento para pasar las horas de trabajo. En los campos de algodón del sur, la música era un medio de expresión y comunicación de la comunidad afroamericana, un lenguaje que la sociedad blanca no llegaba a entender totalmente.

Bukka White en 1940
Desde muy niño, King trabajó en la plantación y con seis años ordeñaba las vacas día y noche y asistía -cuando el trabajo se lo permitía- a la escuela Elkhorn que consistía en solo un aula. Cuando cumplió los diez años, su madre murió y su abuela le siguió poco después, por lo que el pequeño se quedó solo. Decidió quedarse en la cabaña que compartió con su madre y trabajó en una granja cercana. Tras cinco años viviendo solo, decidió volver a Indianola, donde residían su padre y su madrastra Aida Lee. Allí asistió a la Ambrose Vocational High School, pero poco después volvió al Delta para vivir de nuevo en una plantación junto a sus tíos y su primo, el cantante de blues Bukka White. Fue entonces cuando su tío le enseño los primeros pasos con la guitarra.

Con catorce años King se enamoró de una vecina llamada Angel. La relación acabó trágicamente cuando la chica y toda su familia murieron en un accidente. King, emocionalmente destrozado, se buscó una guitarra y se unió a los Famous St. John Gospel Singers. Con ciertas dificultades desde niño para hablar, King descubrió que podía cantar sin tartamudear. Atraído por la vida urbana de Pensicola se trasladó a la ciudad, donde comenzó a buscarse la vida tocando en las esquinas por unas monedas. Empezó cantando canciones gospel, pero pronto se dio dio cuenta de que no era lo que la gente esperaba escuchar. Descubrió que cambiando algunas letras y sustituyendo las palabras 'Oh Señor', por 'Oh, baby', los temas gospel se transformaban en temas de blues, mucho mejor recibidos en las calles de Pensicola, donde ganó sus primeros dólares gracias a la música. En 1943 -durante la Segunda Guerra Mundial- el joven de 18 años fue llamado a filas, pero fue licenciado tras la instrucción porque King conducía un tractor, un vehículo civil considerado esencial en tiempos de guerra.

A finales de los cuarenta, cansado de la vida rural, se traslada a Memphis con la idea de triunfar como músico de blues. Tiene suerte al encontrar pronto trabajo como cantante de jingles comerciales en la estación de radio afroamericana WDIA, donde más tarde ejercería como disc-jockey. Allí comenzó a usar su futuro nombre artístico, 'B.B.' (Blues Boy) y alternaba la emisión de los discos de la emisora con actuaciones propias. También conoció allí a T-Bone Walker: "Cuando le oí por primera vez, supe que tenía que conseguir una guitarra eléctrica".

King adquirió una guitarra eléctrica Gibson y un amplificador. La bautizó 'Lucille' tras un dramático show en un baile en Twist (Arkansas) el mes de diciembre de 1949: Se desencadenó una pelea entre dos hombres que se disputaban el amor de una mujer llamada 'Lucille'. Durante el tumulto, se volcó una botella de keroseno que provocó un incendio. Todo el mundo, incluido King, escapó del local, huyendo del fuego. Una vez fuera, King se dio cuenta de que había dejado su guitarra atrás y, arriesgando su vida, se abrió paso entre las llamas rescatando su instrumento. King llamaría Lucille a todas sus guitarras. La original le sería robada poco después del incidente, en el que perdieron la vida dos personas, pero posteriormente, el músico ha estrenado por lo menos una veintena de guitarras Gibson, convirtiéndose el modelo en un sinónimo de King. Gibson fabricó un modelo especial 'Lucille' en su honor. Ese mismo año 1949 King grabaría su primer disco en el sello Bullet, 'Miss Martha King' (1949).

Ya como bluesman establecido, King pasó los años cincuenta en la carretera tocando dondequiera que hubiera aficionados al blues dispuestos a escucharle, a menudo durmiendo en su coche. En 1951, Sam Phillips, el fundador de Sun Records le produjo un single, '3 O'clock blues', que se mantuvo varias semanas en el nº1 de las listas de R&B. Dos años después ya tocaba en el circuito de clubes de élite, incluido el Apollo Theatre en Harlem. Unos años más tarde, King se asoció con el productor y arreglista Maxwell Davis, con el que formó una banda y adquirió un autobús para desplazarse llamado 'Big Red'. En 1956 fue un año triunfal, con 342 shows realizados. Ese mismo año, King, fundó su propio sello discográfico, Blues Boys Kingdom, situado en Memphis. Allí, entre otros proyectos, produjo a artistas como Millard Lee y Levi Seabury.

Durante esa década, B.B. King se convirtió en uno de los nombres más importantes del R&B con una gran cantidad de hits como 'You know I love you', 'Woke up this morning', 'Please love me', 'When my heart beats like a hammer', 'Whole lotta love', 'You upset me baby', 'Every day I have the blues', 'Sneakin' around', 'Ten long years', 'Bad luck', 'Sweet little angel', 'On my word of honor' y 'Please accept my love'.
Pero la llegada del 'rock'n'roll' relegó a King -cuya música era ahora denominada 'blues urbano'- a un discreto segundo plano.
En 1961, King firmó un contrato con ABC Records, donde publicó tres álbumes 'Mr Blues' (1963), 'B.B. King Live at the Regal' (1965) y 'Confessin' the Blues' (1966), antes de que los ejecutivos de la compañía discográfica lo pasaran al sello Bluesway.


Por fin en 1969, con su álbum 'Completely Well', que contenía 'The thrill is gone', uno de sus temas más conocidos, King pareció romper el hielo y penetró en la conciencia musical norteamericna. Un año más tarde publicó 'Live and Well', que la crítica denominó "el mejor álbum de blues en muchos años".

Tras varios centenares de conciertos al año, King accedió a finales de los años sesenta a templos como el Carnegie Hall. Legendarias fueron también sus actuaciones en algunas cárceles americanas, como Sing Sing. Su carrera continuó triunfal en los setenta ganándose el respeto y admiración de las nuevas generaciones. La revista Guitar Player le nombró 'mejor guitarrista de blues' en 1970 y King realizó numerosas actuaciones en los campus universitarios, donde emergió como un nuevo icono para muchos músicos jóvenes de la época.

Keltner, Voorman y King en Londres
Incluso llegó a acompañar a los Rolling Stones durante una gira de diez días. Uno de sus álbumes más célebres de su etapa en los setenta fue 'B.B.King in London', en el que toca junto a jóvenes músicos británicos como Alexis Korner, Steve Winwood, Jim Keltner, Klaus Voorman, Peter Green y Ringo Starr. Su influencia en los guitarristas que le seguían es inestimable. Desde Keith Richards hasta el bluesman Albert King, que medio en broma aseguraba ser el hermanastro de King, le han tomado prestados más de un riff al de Mississippi.

King citaba entre sus propias influencias a Charlie Christian y Django Reinhardt, así como a T-Bone Walker y Lonnie Johnson. Sus gustos musicales fueron variados. "Me encanta el sonido de la guitarra hawaiiana y asimismo adoro el sonido de la steel guitar de country y esos tipos que dominan el slide". A pesar de la diversidad de influencias musicales o quizás, a causa de ello, King desarrolló un estilo de fingerpicking y un sonido únicos y personales. Abrió las puertas al blues -no sin críticas de los puristas- a influencias del jazz y el pop y tocó junto a la Royal Philarmonic Orchestra en 'Royal Jam' (1982).

King, que se confesaba fan de Sinatra, colaboró con eminentes figuras del pop como Leon Russell, Bonnie Raitt, Taj Mahal y Carole King, así como con músicos de jazz como Ernie Watts, Tom Scott o The Crusaders ('Midnight Believer' 1978). Cuando en 1989 el grupo U2 presentó como estrella invitada a B.B.King en el tema 'When Love comes to Town', fue descubierto por una nueva generación de admiradores, por lo que en los noventa estuvo muy activo realizando giras y grabando álbumes como 'Blues Summit' (1993), 'Lucille & Friends' (1995) y 'Deuces Wild' (1997), en los que contó con colaboraciones de varios artistas como Robert Cray, Buddy Guy, John Lee Hooker, Etta James, Eric Clapton, Willie Nerlson, Van Morrison, Bonnie Raitt o Tracy Chapman.

En el año 2000 publicó 'Riding with the King' con Eric Clapton e inauguró su propio Club de Blues en Nueva York. En su carrera publicó más de 50 álbumes y a pesar de su edad siguió actuando en directo hasta poco antes de su muerte, calculándose que lo hizo más de 15.000 veces a lo largo de su carrera de 65 años. Su última entrega fue el álbum 'One Kind Favor' (2008), por el que recibió el Grammy nº 15 de su carrera. En febrero de 2012 actuó en la Casa Blanca y el presidente Obama cantó con él una estrofa de 'Sweet Home Chicago'. Murió el 14 de mayo de 2015 a los 89 años.